Maafushi es la isla más popular de Maldivas. Hasta hace muy poco las islas locales estaban cerradas al turismo porque había una regulación que prohibía a los locales mezclarse con los turistas. Por eso, si venías a Maldivas la única opción eran los resorts privados. Sin embargo, en 2009 un cambio de gobierno hizo posible que las islas locales abrieran sus puertas al turismo y la primera que lo hizo fue Maafushi, que en 2010 abrió la primera guesthouse de todo el país. En tan solo 10 años la isla se ha desarrollado y se ha adaptado a las demandas de los turistas rapidísimo, pasando de ser una isla de pescadores a vivir completamente del turismo. Por eso, al haber tanta oferta de alojamientos y actividades, es posible encontrar precios más baratos.

CÓMO LLEGAR
La mejor forma y la más económica de moverse entre islas es con ferry local. Los ferrys salen desde Male y se dirigen a un atolón para conectar todas las islas de ese atolón. Así pues, en Male se puede coger el ferry número 309 que hacer la ruta Male – Gulhi – Maafushi – Guraidhoo.
Este ferry sale todos los días, excepto los lunes y viernes, a las 15.00 y llega a Maafushi a las 16.40. Para volver de Maafushi a Male hay que madrugar un poquito más, ya que sale a las 7.20 de la mañana. Te dejamos la ruta completa con el horario y si tienes alguna duda puedes consultar la página web aquí.
ISLA | IDA | VUELTA |
Male | 15.00 | 9. 00 (fin trayecto) |
Gulhi | 16.15 | 7. 50 |
Maafushi | 16. 40 | 7. 25 |
Guraidhoo | 17. 00 (fin trayecto) | 7.00 |
Nosotros vinimos a Maafushi en dos ocasiones. Éramos un poco reacios a venir porque queríamos ir a islas menos turísticas y pensábamos que no nos iba a gustar. Así que la primera vez decidimos hacer una excursión de un día desde Guraidhoo (por nuestra cuenta, cogiendo el ferry local) para ver qué ambiente había y nos gustó bastante. Además, vimos que las excursiones eran más baratas que en Guraidhoo y decidimos volver otro día para hacer una.
1. BIKINI BEACH
La bikini beach de Maafushi es muy bonita. El agua parece una piscina, te adentras metros y metros en el mar y no cubre nada. Además tiene un color azul increíble. Es cierto que había más gente que en otros lugares pero nos atreveríamos a decir que es una de las más bonitas en cuanto al color del agua. Lo mejor es ir tempranito por la mañana. A nosotros nos paró el ferry en Maafushi a las 7.25 de la mañana y estuvimos solos en la playa durante un buen rato.


2. EXCURSIÓN BÁSICA DE SNORKEL
Las oferta de excursiones es super amplia. Se puede ir a ver tiburones ballena (100$), tiburones nodriza (50-60$), bancos de arena, pasar un día en un resort… O la más básica y barata que fue la que escogimos nosotros por 30$. ¿En qué consiste?

Primero paramos en un arrecife para hacer snorkel y vimos un montón de coral y pececitos pequeños de colores.


Después fuimos a un banco de arena a comer. Allí nos pusieron unas sombrillas y nos sirvieron pollo y verduras. Estuvimos como unos 40 minutos en total pero como estuvimos comiendo, sentimos que no nos dio mucho tiempo de disfrutarlo. Aún así, nos pareció bonito y bastante salvaje, tanto que no era el típico banco de arena con arena fina sino que había bastante coral. Como curiosidad, nos contaron que este era el único banco de arena que quedaba cerca de Maafushi ya que el nivel del mar ha subido y los ha cubierto por completo.



Después de comer vino lo más chulo del día: los delfines. Fuimos a una especie de laguna y nos dijeron que no siempre se veían, que no fuéramos con expectativas muy altas. Pero cuando llegamos empezamos a ver un montón de delfines! No había 10 ni 20. Había cientos! Pasaban por delante de nosotros con chulería, saltando y haciendo piruetas como si supieran que estábamos todos allí emocionados por verlos y quisieran impresionarnos. O quizás esa era su intención ¿No dicen que los delfines son unos de los animales más inteligentes del planeta? De cualquier manera fue un momento mágico, de lo mejor que hicimos en Maldivas. Lo único que nos fastidió fue que no pudimos saltar y nadar con ellos porque íbamos con el tiempo justo.


La última parada fue otro arrecife en el que pudimos ver alguna tortuga, nosotros hemos visto tortugas muchas veces y veníamos con la emoción de los delfines y la rabia de no haber podido nadar con ellos y esta última parada no la disfrutamos tanto.
VALORACIÓN: Solo por el momentazo de los delfines para nosotros mereció la pena la excursión. Pero hubo un par de cosas que no nos gustaron mucho (comparándolo ahora con otras excursiones que hicimos más adelante en otras islas): en un mismo barco va mucha gente, quizás estábamos 20 personas y los tiempos son muy estrictos, por lo que no nos dio tiempo de disfrutar de cada parada lo que nos hubiera gustado. Aún así lo que se hace y lo que se ve es genial. La excursión la hicimos con el hotel Kaani Village & Spa y nos costó 30$, más que en otros lugares (que suele ser 25$). Pero la guía es española, Leire, y lo pasamos muy bien con ella.
.
3. VER EL ATARDECER EN LIYELA
Para acabar el día vimos el atardecer en Liyela, un restaurante que tiene una terraza en la azotea. Nos habían recomendado probar el lava cake de chocolate pero era caro, así que nosotros solo nos pedimos un helado para compartir de mango y piña, que era casero y también estaba buenísimo. Tiene una zona tipo chill out, con cojines en el suelo que estaba muy bien y vimos un atardecer muy bonito.

4. PLAYA LOCAL
En el lado opuesto a la a isla donde te deja el ferry hay una playa larguísima y preciosa. No es una bikini beach, por lo que si te quieres bañar tienes que hacerlo cubierto. Pero está genial para pasear, sobre todo al atardecer y por la noche cuando ya no hace tanto calor. Nosotros fuimos cuando ya estaba oscuro, sacamos las linternas del móvil y pudimos ver un montón de rayas pequeñitas y tiburones nadando por la orilla. Y también, por supuesto, cientos de cangrejos!

5. PASEAR POR LA ISLA
Siempre nos gusta callejear por cada lugar al que vamos. Nada más bajar del ferry empezamos a ver un montón de agencias que organizan excursiones y actividades acuáticas. Por toda esta zona eso es lo único que se ve, cosas orientadas al turismo. Para ver un poco más de autenticidad y vida local hay que alejarse un poco y caminar en dirección a la prisión. Por el camino nos encontramos a muchos niños en sus bicis, gente con moto de un lado a otro o gente descansando en las calles en sus bancos típicos. Nos pareció curioso que con lo pequeña que es la isla, que se puede ir perfectamente andando de un lado a otro, la gente se mueva con motos.

DÓNDE COMER
A nosotros el restaurante que más nos gustó por la relación calidad – precio fue Hot Bites. En especial, recomendamos la hamburguesa y el oreo shake. También probamos el Harbour café y no nos pareció mala opción. Comimos una ensalada césar que estaba muy cargada de todo y estaba muy rica y una hamburguesa. Ambos restaurantes tienen tanto comida local/asiática como occidental.


Otra opción son los buffets. Los hoteles suelen tener buffets por la noche por unos 12$ por persona. Nosotros no los probamos, pero en algunos sitios tenían buena pinta.
DÓNDE DORMIR
Íbamos a estar solo una noche y buscábamos lo más económico posible. Así que nos fuimos hacia la parte más local de la isla y nos alojamos en Chao, justo al lado de la prisión. Estaba a unos 10-15 minutillos andando del «meollo» pero el camino se hace ameno. La habitación estaba bastante bien, con aire acondicionado y teníamos cocina que podíamos usar. Aun así, en la cocina nos dejaron desayuno para que nos lo preparáramos nosotros: tostadas con mantequilla y mermelada de varios tipos, huevos, salchichas, manzanas y té. Este alojamiento lo encontramos en AirBnb y nos costó 31 euros. La verdad es que estuvimos muy a gusto en este lugar, muy tranquilito, bien de precio y con todo lo que necesitas.
RECUERDA: Si te abres cuenta por primera vez en AirBnb puedes beneficiarte de 25€ de regalo para tu próxima reserva aquí.
.
MAPA
.
NUESTRAS IMPRESIONES
- Veníamos con la idea de que Maafushi no nos iba a gustar y no nos decepcionó tanto. Es verdad que es más turística y menos local que otras, pero la playa que tiene es muy chula y aquí hay más opciones de alojamientos, restaurantes y actividades. De todas formas, nosotros no dedicaríamos mucho tiempo a Maafushi porque hay otras islas que nos parecieron mucho más bonitas.
- En cuanto a las excursiones sí que es cierto que son más baratas que en algunas islas. Sin embargo, hay algunas excursiones como la de los tiburones nodriza o la de tiburón ballena, que merece más la pena hacerlas en otras islas que están más cercanas al lugar donde se suelen ver a estos animales. Hay menos gente, se disfrutan más y los precios son parecidos o incluso más baratos. Os contamos en los próximos posts.
.